La capilla de Aké se levanta sobre una pirámide maya.
En esta capilla se celebra la tradición del Cristo Negro cada Sábado Santo, la cual tiene más de 137 años.
Todos los sábados de gloria de la semana santa, la capilla es visitada por más de dos mil personas del pueblo de Cacalchén, quienes van a buscar al Cristo Negro para honrarlo con oraciones que cumplen una tradición que narra que años atrás se llenó de muerte y enfermedades al pueblo de cacalchén y se oró al Cristo negro para liberarlos de estos males. Así es como nace esta tradición.
- LA BAJADA DEL CRISTO DE LA EXALTACIÓN -
El Santo Cristo fue encontrado por los habitantes de Cacalchén hace más de 200 años en una noria de la hacienda Ruinas de Aké y transportado para su veneración a la ciudad de Cacalchén, Yucatán. Sin embargo de manera inexplicable la imagen regresaba al lugar en donde fue hallado y por tal motivo se decidió dejarlo en ese ejido y transportarlo año con año a esta ciudad para realizarle sus festejos y gremios.
La historia de la imagen menciona en un pasaje que los dueños de la hacienda en su momento negaron el permiso de bajarlo y transportarlo a Cacalchén para que se le realizaran sus novenarios, sin embargo después de esta negativa empezaron a morir sus cultivos, por lo que tuvieron que llamar a sus custodios para que se cumpliera con la tradición. En la actualidad cada sábado de gloria miles de habitantes de la comunidad de Cacalchén cumplen con la tradición de bajarlo y transportarlo a lo largo de 13 kms de un camino de terracería para cumplir con esta tradición con mucha fé y devoción.